El presente trabajo ilustra, a partir de una viñeta clínica, la comunicación entre inconscientes a partir de un objeto que sólo cobra sentido una vez aceptada la mutualidad, permitiendo de esta manera el surgimiento del tercero analítico. Para que éste pueda emerger se hace necesario el interjuego de mutualidad e intersubjetividad de la díada analítica (Ogden, 2014). ¿Pero, cómo podría crearse un tercero sin la presencia del otro, fuera del contexto de la sesión? ¿Es eso posible? Será la pregunta que espero responder a lo largo del escrito. Ogden (2014) menciona que el tercero surge en un espacio intersubjetivo entre ambos participantes. Sin embargo, lo que pretendo ilustrar es que dichos fenómenos intersubjetivos pueden empezar en el contexto de la terapia, pero que, en ocasiones, su aparición puede extenderse más allá de los límites físicos del consultorio; ya que al estar inmersos en una matriz relacional (Mitchell, 1993) pueden activarse diversos puntos nodales de dicha matriz en diferentes contextos, que lleven a una comprensión de la comunicación entre inconscientes (Bollas, 2018), y en esta ocasión surgió un tercero analítico en un espacio intersubjetivo entre dos personas, aunque la díada analítica no estaba presente físicamente.
Palabras clave:
intersubjetividad,
Subjetividad,
Mutualidad,
tercero analítico
Comentarios (0)